martes, 2 de mayo de 2017

La judiada en Alcorisa: un día de hermandad

Jornada de convivencia en Alcorisa



El día de la judiada en Alcorisa es algo más que una tradición, 
es algo más que una costumbre...











¡Es un día especial!
¡Es una comida de hermandad!


El primero de mayo se celebra de una forma especial en la localidad turolense de Alcorisa. Desde 1965, hace ya 52 años, la Asociación Peña Club Paraíso Caracas organiza las Fiestas de Primavera,  Y como acto central está 

"la comida de hermandad a la que  está invitado todo el mundo”


Este año hemos tenido la oportunidad de hablar con Ángel Palomar, actual cocinero de las judías y la ternera...


Ángel lleva ya 30 años como "jefe" de cocina, desde el año 1987, aunque anteriores a él ya han pasado cuatro cocineros y al principio estaba como ayudante para servir a las mesas. Los primeros cinco años era una comida solo para los socios del Club Paraíso Caracas, después se abrió para el pueblo y finalmente para todo el mundo que quisiera venir a comer y probar las tan famosas judías y la ternera.


Ángel hoy lo sigue llevando con la misma ilusión que el primer día. aunque nos comenta que ahora ha cambiado mucho: "esto no es nada, esto es poco. en comparación a lo que había llegado a ser". En los años 92-93 se llegaron a hacer 600 kilos de judías y 1.500 de vaca y  se llenaban 45 calderos de estos.


Aquí han llegado a reunirse hasta diez mil personas comiendo. Nos sigue contando Ángel. Al principio se daban olivas negras, vino, naranjas y ron quemado... hasta hace pocos años... pero ahora con la crisis todo eso se tuvo que ir suprimiendo.


Han llegado a venir autobuses desde Murcia, Valencia, Castellón, Tarragona, Madrid, Barcelona, Zaragoza, Cuenca, Teruel, aquí han venido autobuses de todos lo sitios.

Y todo gracias a la Peña Club Paraíso Caracas y al esfuerzo y trabajo incansable del gran equipo de ayudantes que además todos son voluntarios, al igual que los que sirven las mesas. 


Este año su esposa está delicada de salud, pero gracias a que su hija ha venido para cuidar de ella ha podido estar presente... junto a David, su hijo,  Raquel, y a todo el equipo de voluntarios que les ayudan, 


¡Este año también se han podido comer las famosas 
judías y ternera de Alcorisa!


Sí, como Ángel nos comentaba, todos los vecinos de la Villa, año tras año, hace ahora ya 52 años se reúnen para comer juntos

A pesar de los años esta comida de hermandad lejos de ser una rutina es un día esperado por todos con ilusión lleno de emociones y de alegría, un día que hay que mantener en la historia de Alcorisa.











Para los más mayores está lleno de recuerdos y añoranza, muchos de ellos echando en falta a algún ser querido que este año ya no está entre nosotros, pero a pesar de esto siguen fieles...

ahí "al pie del cañón" para conservar la tradición en honor a ellos y con el deseo de mantener la continuidad de estos momentos de calor y calidad humanos.

Nuestros mayores son un ejemplo a seguir por las nuevas generaciones...


Los más jóvenes disfrutan del momento, como algo nuevo, algo fresco y se arraigan con fuerza e ilusión a estas costumbres, aunque las viven de una forma diferente a como se vivieron en sus orígenes, pero finalmente se mantiene la misma esencia: convivencia y hermandad.


Las expectativas que días atrás generaron este día en nuestros cocineros, eran más que confirmadas al ver las sonrisas en los rostros de todos los que disfrutaron de esta comida,


Ya habían pasado los nervios del día anterior, ante la amenaza de lluvia, puesto que la tarde noche del domingo llovió sin descanso,

Pero hoy lucia el sol, hoy era un nuevo día. Hoy era el día para demostrar que las judías y la ternera de Alcorisa pueden traspasar cualquier frontera por su excelente sabor y por la profesionalidad de sus cocineros,


Nuestros cocineros, Ángel Palomar con una experiencia de treinta años al frente de las cazuelas, este año más que nunca tenía el deseo de que las judías y ternera quedaran "perfectas".

Hoy su esposa no podía acompañarle como cada año, su salud no se lo permitió,  ella no estaba allí junto a él, pero ahí estaba su hijo David  y Raquel con el mismo deseo y cariño: todo tenía que salir perfecto,


Ellos junto a todo un gran equipo trabajaron  sin descanso desde primeras horas de la mañana para prepararlo todo...

Ese trabajo difícil, cansado e invisible que para el resto pasa desapercibido como es el traer la leña, las ollas, la comida,... encender los fuegos, preparar cada uno de los ingredientes... todos en su justa medida, la sal, los ajos, la cebolla...


Cuidar que los fuegos no se apaguen, etc...


Todos se entregaron al trabajo sin reparar en esfuerzos y sin apercibir el humo que se desprendía de las cazuelas y que a los que nos acercábamos no nos dejaba respirar y hacía que nuestros ojos se llenaran de lágrimas... "¡No estáis acostumbrados" nos decían... 


Pero,  ¡todo el esfuerzo mereció la pena!


Se podían ver a las familias llegando cargados con sus mesas, sus bebidas, postres y cubiertos, algunos ya con más experiencia se habían traído sus toldos y sombrillas... todo para pasar un día ¡excepcional!


Niños y mayores paseaban en un ambiente relajado y distendido buscando sus mesas y el grupo de amigos, la peña o la familia con los que habían quedado para comerse sus judías y su ternera.


El olor de las judías y la ternera ya empezaba a invadir la plaza


La plaza empezaba a llenarse y poco a poco todos empezaron a tomar asiento en sus respectivas mesas... porque todos tienen la experiencia de que judías y ternera como las de Alcorisa no se comen en ningún lugar del mundo...

¡Esta es una experiencia única!

¿El secreto de tan excelente cocina?

El cariño y la entrega, el amor hacia 
el pueblo de Alcorisa y todos sus vecinos...


Mientras se esperaba el momento para degustar la comida todos estaban entregados en alegres y cálidas charlas 

En el calor de las tertulias parecían fundirse abrazos fraternos,


Hoy se rompen las  barreras de la rutina del día a día


Muchos aún y viéndose cada día, por el estrés de los trabajos y las distintas responsabilidades familiares,  no pueden disfrutar de este momento de relax y convivencia


Y ¿qué mejor para romper barreras que sentarse alrededor de una mesa con un plato de judías y de ternera y entregarse a la conversación compartiendo los unos con los otros, sin atisbo de tristeza y en un ambiente cordial?


Hoy no importa tu color...  no importa tu estatus social... no importa tu cargo


hoy reina la convivencia... Hoy reina el servicio...


En estos momentos de crisis y dificultad para muchos lo importante es que reine el amor y la fraternidad,

porque es entonces en ese ambiente, cuando empezamos a tratar con las personas, cuando dejamos a un lado lo que son o lo que no son, que descubrimos que  aun y cuando pareciéramos muy diferentes... todos somos muy parecidos  


nuestros sentimientos son los mismos, nuestras necesidades son las mismas... y finalmente llegamos a la conclusión de que todos necesitamos de todos.


Es el momento de decir: "Dame la mano"
 ¿Caminamos juntos en esta misma senda de la vida?


Se finalizó la comida con el ya esperado Bingo, que en esta ocasión tardó en llegar... ¡pero llegó! tanto la Línea como el Bingo... aparecieron los afortunados... y felices se llevaron su premio.


La música de los animadores, la música de fondo y la perfecta acústica a la que ya nos tiene acostumbrados Alfonso Félez contribuyeron a que Alcorisa pasara un día para recordar y añadir a su historia...


¡Amor, armonía y paz!

El Monte Calvario, las montañas, la naturaleza... que llevan siglos ahí...


son testigos mudos de Alcorisa, de sus gentes, sus ilusiones, sus temores y las vivencias que encierran estos días y esta comida de hermandad


¡Si tuvieran vida: 
Nos hablarían cosas entrañables que nos llenarían de 
satisfacción y amor por Alcorisa!









Desde Alcorisa, el pueblo del Calvario
y del mejor aceite de oliva virgen extra "Alcorcí"
Teruel, la provincia de los Amantes
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